KL 361 JF Tiras con soporte de tejido para Acero, Metal universal, Metales no férricos, Madera, Acero inox
Agente aglomerante | Resina sintética |
Tipo de grano | Óxido de aluminio |
Revestimiento | cerrado |
Base | JF-Algodón |
Acero | |
Metal universal | |
Metales no férricos | |
Madera | |
Acero inox | |
Plástico |
|
Construcción en metal |
Industria maderera |
Apta para múltiples materiales: la tira abrasiva KL 361 JF
La tira abrasiva KL 361 JF con soporte de tejido posee un amplio espectro de aplicaciones. Es apropiada para el mecanizado de:
- acero,
- acero inoxidable,
- metales no férricos y
- madera.
De esta manera, esta tira abrasiva también es ideal para el bricolaje. Se puede utilizar para el equipamiento de lijadoras orbitales. Está disponible en diferentes anchuras y granulometrías.
Gran adaptabilidad a la forma de la pieza
Para la tira abrasiva KL 361 JF se utiliza un soporte de algodón JF. El soporte de tejido de la tira abrasiva garantiza una alta adaptación a la forma de la pieza a mecanizar y consigue una superficie muy fina. Además, este soporte de algodón asegura una mayor resistencia al desgarro que un soporte de papel. Por esta razón, esta tira abrasiva es apropiada tanto para el lijado de formas como para el lijado de erosión.
Duradero y apropiado para el trabajo rápido
El grano abrasivo de óxido de aluminio está aplicado en distribución cerrada en el soporte de algodón JF. El óxido de aluminio pertenece a los tipos de grano sintéticos. Frente a los tipos de grano naturales, por ejemplo esmeril o granate, ofrece la ventaja de tener unas características más uniformes. El óxido de aluminio es muy duro y tenaz. Se une al soporte con la ayuda de resina sintética. La distribución cerrada significa que el soporte está cubierto prácticamente al 100 % de granos abrasivos. Estos dos factores son responsables de la larga vida útil de la tira abrasiva y del elevado arranque de material durante el lijado. Con una distribución cerrada, la fuerza empleada para el lijado se distribuye entre un gran número de puntas de grano. Por este motivo, la punta individual no penetra tanto en el material como con otros tipos de distribución. El resultado es un mecanizado de superficie más fino. Este se ve apoyado, además, por la alta adaptación del soporte.